Diócesis de Atlacomulco

La diócesis de Atlacomulco (en latín: Dioecesis Atlacomulcana) es una circunscripción eclesiástica de la Iglesia católica en México.

La diócesis tiene 5364 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en el estado de México en los 17 municipios de: Acambay, Aculco, Atlacomulco, Chapa de Mota, El Oro, Jilotepec, Jiquipilco, Jocotitlán, Ixtlahuaca, Morelos, Polotitlán, San Felipe del Progreso, San José del Rincón, Soyaniquilpan de Juárez, Temascalcingo, Timilpan y Villa del Carbón.

En 2020 en la diócesis existían 65 parroquias agrupadas en 12 decanatos:[1]​ La diócesis fue erigida el 3 de noviembre de 1984 con la bula Quandoquidem ad plenius del papa Juan Pablo II, derivando el territorio de las diócesis de Toluca (hoy arquidiócesis) y Cuautitlán.

Su segundo obispo fue Constancio Miranda Weckmann, quien tomó posesión el 4 de agosto de 1998 y luego pasó a ser arzobispo de Chihuahua.

Según el Anuario Pontificio 2021 la diócesis tenía a fines de 2020 un total de 1 222 500 fieles bautizados.

Excatedral de Nuestra Señora de Guadalupe
Decanatos de la diócesis