Síncope
[1] Existen algunos cambios físicos que ocurren antes de un síncope como serían mareos, sudoración, palidez, visión borrosa, náuseas, vómitos, entre otros.[1][9] Algunas causas psicológicas que pueden llevar a una persona a padecer un síncope pueden estar relacionadas con experiencias en las que se involucra el miedo, la ansiedad o el pánico; particularmente después de un evento estresante usualmente de naturaleza médica.[1] Entre las causas de un síncope relacionadas con el corazón se pueden encontrar las arritmias cardíacas, problemas con los vasos sanguíneos o músculos cardíacos y obstrucciones de los vasos sanguíneos debido a TEPs o disecciones aórticas, entre otros.[1] Un EGC es efectivo para detectar problemas cardíacos que podrían causar un síncope, como son un ritmo cardíaco anormal, una enfermedad coronaria, entre otras anormalidades, como son el síndrome del QT largo o un síndrome de Brugada.[1] La presión baja en la sangre o un ritmo cardíaco alto pueden indicar la pérdida de sangre o deshidratación, mientras que, un nivel de oxígeno bajo puede llegar a verse en síncopes en los que involucra una embolia pulmonar.