[19] Por esta razón, Buenos Aires ha tenido una población predominantemente euro descendiente.
Según los resultados censales, la población nacida en Europa se ubicaba en un 49,82% en 1887, 47,78% en 1895, 49,36% en 1914 y 24,93% en 1947.
[19][20] Durante las últimas décadas, debido a la migración interna desde las provincias del norte y, especialmente, a la inmigración de Bolivia, Perú y Paraguay (que tienen mayorías amerindias y mestizas),[21][22][23] el porcentaje de argentinos euro descendientes en ciertas zonas del Gran Buenos Aires también ha disminuido significativamente.
[24] Según la Encuesta de la Deuda Social Argentina (EDSA) del año 2017, donde se entrevistó a 1.758 personas en el Gran Buenos Aires, el 61,5% se auto identificó como "blanco", el 37,2% como "mestizo/morocho", el 0,9% como "rasgos indígenas", el 0,2% como "negro o mulato", el 0,1% como "oriental" y 0,1% como "otro".
[27] A lo largo de las siguientes décadas se desarrollaron diferentes censos, arrojando datos similares.
[29] Catolicismo (56,4%) Sin religión (26,2%) Evangelicalismo (15,0%) Otras religiones (1,8%) Otros cristianos (0,4%) No sabe (0,2%) Según la encuesta realizada por el CONICET en el Área Metropolitana de Buenos Aires, en 2019 el 71,8% eran cristianos, de los cuales el 56,4% de los encuestados afirmaron profesar la religión católica, esto representa una caída del 12,7% con respecto a la encuesta realizada en 2008, donde el número ascendía al 69,1%.
[31][32] Por otro lado, el 15% profesaba una religión evangelista y el 0,4% eran Testigos de Jehová o Mormones.
[34] Desde 1856 a 1914, a raíz de la llegada de las grandes corrientes inmigratorias, la ciudad creció con una de las tasas anuales más grandes del mundo y en 1914 era la duodécima ciudad más grande del mundo con 1.575.000 habitantes, así como creció cultural y comercialmente.
[35][36] Esto se dio al haber sido el principal receptor de inmigrantes, debido a que, en su mayoria, estos inmigrantes ingresaban a través del Puerto de Buenos Aires.
Según los resultados censales, la población nacida en Europa se ubicaba en un 49,82% en 1887, 47,78% en 1895, 49,36 en 1914 y 24,93% en 1947.
[19] A medida que la inmigración europea declinó en las décadas de 1930 y 1940, la ciudad comenzó a recibir un mayor número de migrantes del interior del país.
Desde Asia comenzaron a llegar inmigrantes provenientes de Corea del Sur en los años 60, Taiwán en los años 80, y de China continental en los años 90, este último grupo desarrolló un rápido crecimiento, llegado en 2013 a ser el cuarto grupo inmigratorio más grande, únicamente debajo de paraguayos, bolivianos y peruanos.
Más del 82% de los inmigrantes tienen un origen americano, siendo las principales comunidades los: paraguayos (32,46%), bolivianos (15,75%), venezolanos (10,68%), peruanos (9,16%) y uruguayos (5,63%).
[41] Como fenómeno contrario a las villas o barrios de emergencia, se formaron los countries o barrios cerrados, siendo urbanizaciones que apuntan a la clase alta.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires existen 49 barrios y en el Conurbano 1.196.