[5] Se formó en la Escuela de Bellas Artes de Madrid, estudios que según el propio Vierge habrían comenzado en 1864 y donde habría tenido como maestro a Federico Madrazo.
[3][d] Hacia 1867, ilustraba «Madrid la Nuit», de Eusebio Blasco, según comenta el propio Vierge.
[3] Marchó pronto a París, con su familia,[20] probablemente hacia 1869,[e] buscando fortuna y ayudado por el empuje de su temperamento español.
[31] El pintor no tardó en probar el extraordinario vigor y carácter pictórico de su arte: aparte de su dedicación a la creación de obras originales, también trabajó grabando en madera ilustraciones enviadas por dibujantes corresponsales en otros países, como Luc-Olivier Merson en Roma y su propio hermano, Samuel Urrabieta, en España.
[21] Hacia 1881 o 1882[l] sufrió un ataque de hemiplejia,[9][27][37] mientras trabajaba en el Buscón.
[42] La parte derecha de su cuerpo quedó inmovilizada, así como afectada el habla y la memoria, sin embargo consiguió recuperarse parcialmente,[m] y pudo reanudar su trabajo aprendiendo a dibujar con la mano izquierda.
[21] En 1898 Vierge colaboró con L'Image, una revista dedicada a ensalzar la técnica del grabado sobre madera, y dos años más tarde, en la Exposición Universal de París, consiguió un primer premio.
[57] En 1902 exhibió en el «Nuevo Salón» una escena de la guerra franco prusiana.
[21] Según La Ilustración Artística Vierge «conservaba para España la preferencia de un cariño filial; y aun parece como que la ausencia avivara en él el culto por el color local de su patria y le hiciera saborear su singularismo sin rival»[58] y, en palabras de José Francés «Silvio Lago», «a través del tiempo y de la distancia Daniel Vierge conservó siempre hondo amor a España».
[11][64] Sin embargo, con el paso del tiempo, Vierge ha terminado siendo considerado como un autor «olvidado» en España.
A Dictionary of Arts, Sciences, Literature, and General information (en inglés) (11.ª edición).