Abigeato

El abigeato es un delito punible y estipulado en los códigos legales de la mayoría de los países ganaderos y que consiste en el robo o hurto de ganado o animales domésticos, principalmente caballos y vacas, aunque también se da en ovinos.

Lo que vulgarmente se llama cuatrero en Argentina y Chile o matrero en Uruguay.

[1]​ Para combatir el abigeato existen varios métodos, desde conseguir armas[1]​ o vehículos[2]​ hasta modernas técnicas en las que se compara el ADN del animal faenado con el de las carnicerías o mataderos.

Con el aumento de la ganadería en el siglo XIX y principios del siglo XX, se volvió todavía más común y era considerado un delito mayor muy grave, porque podía empobrecer absolutamente a una persona o familia; se castigaba con la pena de muerte, sumaria o por linchamiento en algunos países.

Se ha reconocido desde el Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca, que detrás del abigeato existe un negocio donde operan organizaciones delictivas que comercializan la carne y que no se trata simplemente de acciones de personas aisladas motivadas por el hambre.

Pintura que retrata un cuatrero, obra de W. H. Dunton
Odiseo , también llamado Ulises , y Diomedes roban los caballos del rey de Tracia Reso , ilustración de cerámica roja griega antigua que reproduce una pintura de Licurgo, c . 360 a. C.