Cristo de Vilanova dos Infantes

La imagen, tallada en madera probablemente a finales del siglo XII o tal vez a principios del siglo XIII (algunas fuentes afirman hacia 1220),[1]​ constituye una de las cuatro estatuas románicas de Cristo crucificado existentes en la provincia, destacando por encima de ellas al ser considerada la más antigua de toda Galicia.

Es probable que la talla custodiada en Vilanova dos Infantes proceda del monasterio femenino de Santa Clara,[3]​ fundado hacia el año 934 por la madre de San Rosendo, Santa Ilduara.

Influenciada posiblemente por la escuela del Maestro Mateo y con claros matices bizantinos,[4]​ la talla presenta a Jesús sujeto a una cruz con forma de tronco de árbol, los pies separados con un clavo cada uno en vez de uno sobre otro y sujetos ambos con el mismo clavo (acorde al ideal realista de los Cristos románicos), y un semblante tranquilo y relajado, con los ojos abiertos y ninguna muestra de dolor, todo ello símbolo del triunfo sobre la muerte.

Por su parte, los brazos están colocados de forma casi horizontal y los dedos de las manos aparecen completamente extendidos, destacando las costillas sobre el torso.

El manto de pureza se halla anudado en la cadera y cae hasta las rodillas ligeramente flexionadas, mostrando una mayor longitud por la parte posterior.