La covada (del francés couvade, a su vez del verbo couver, 'incubar') es una costumbre presente en ciertas culturas por la que la madre, durante el nacimiento de un hijo o inmediatamente después, le cede el lecho al padre.
En muchas sociedades, la función social de la covada es reafirmar el papel o la legitimidad del padre.
La covada implica al padre realizando el mismo comportamiento que su esposa durante o cercano al trabajo de parto, incluyendo dolores, reclusión posterior, restricciones alimenticias y tabús sexuales.
Según Johann Jakob Bachofen (autor de la primera monografía sistemática sobre el matriarcado), la covada tiene su origen en el tránsito de las primitivas sociedades matriarcales a las patriarcales.
En aras a una política positiva hacia la figura del padre, que permita incentivar la implicación de los hombres en las responsabilidades familiares, la presente Ley plantea la ampliación del período de paternidad a cuatro semanas, exclusivo para el padre.