En la mayoría de los casos, el propósito es introducir una característica nueva a la planta que naturalmente no se presentaría en estas especies.
[17] Esto es facilitado por transposones, retrotransposones, provirus y otros elementos genéticos móviles que naturalmente trasladan el ADN a un nuevo loci en el genoma.
[23] Desde entonces, se han introducido importantes características incluyendo los genes de enanismo y resistencia al moho.
[28] En 1987, Plant Genetic Systems (Ghent, Bélgica), fundada por Marc Van Montagu y Jeff Schell, fue la primera compañía en diseñar genéticamente una planta (tabaco) resistente a los insectos, al incorporar genes que producían proteínas insecticidas obtenidas de Bacillus thuringiensis (Bt).
[38] La desventaja más grande de este procedimiento es que se puede provocar un daño significativo al tejido celular.
Por ejemplo, para expresar un gen solo en granos de arroz y no en hojas, se utiliza un promotor endosperma específico.
En muchos casos el ADN insertado debe ser ligeramente modificado para expresarse correctamente y eficientemente en el organismo huésped.
[52][53][54][55] Algunas plantas han sido diseñadas para exhibir bioluminiscencia que podría convertirse en una alternativa sustentable a la luz eléctrica.
Esta especie carece de genes que codifiquen proteínas para reprimir las defensas contra el oidio.
Gao usó las herramientas de edición genética TALENs y CRISPR sin agregar o cambiar otros genes.
[58][59] El valor económico de alimentos modificados genéticamente para agricultores es el mayor beneficio, incluyendo países en desarrollo.
Una revisión en el 2006 de los resultados del algodón Bt por economistas agrícolas llegó a la conclusión que "el balance general aunque prometedor, está mezclado.
Por ejemplo los granos de soja genéricos tolerantes a glifosato ya están disponibles.
[83] La primera cosecha modificada genéticamente aprobada en Estados Unidos fue el jitomate FlavrSavr que tenía mayor duración de vida.
Esta característica se le agregó a las variedades Granny Smith y Golden Delicious .
La característica fue agregada a la Russet Burbank, la Ranger Russetay a las variedades atlánticas[84] Se estaban desarrollando plantas diseñadas para tolerar estresores no biológicos, como las sequías,[84][85][100][101] el congelamiento[102][103] alta salinidad del suelo,[104][105] o falta de nitrógeno[106] En el 2011, el maíz DroughtGard de Monsanto se convirtió en la primera cosecha modificada genéticamente resistente a las sequías en ser aprobada para comercializar en E.U...[107] Desde 1999 la característica más prevaleciente ha sido la resistencia al glifosato[108] El glifosato, (el ingrediente activo en Roundup y en otros productos herbicidas) mata plantas al interferir con la ruta del ácido shikímico, la cual es esencial para la síntesis de aminoácidos aromáticos, fenilalanina, tirosina, y triptófano .
Entonces, desarrollar cosechas que pudieran resistir el rociado de glifosato reduciría riesgos tanto en el ambiente como en la salud, y le daría una ventaja agrícola del agricultor.
[117] Monsanto ha solicitado la aprobación para una nueva especie que es tolerante tanto al glifosato como a dicamba.
Sus ventas bajas condujeron a que se retiraran del mercado después de 3 años.
Estas especies están disponibles comercialmente aunque la resistencia no es estándar entre las variantes del maíz genéticamente modificado.
Normalmente, la compañía de semillas guarda dos variedades innatas y las cruzan con una híbrida que luego es vendida.
Esta característica es controlada aparentemente por un solo gen dominante, pero cruzas tradicionales no han sido exitosas en crear maíz que se reproduzca asexualmente.
Por ejemplo, si la temperatura no es ideal, el estrés térmico puede reducir la producción de toxinas Bt dejando a la planta más susceptible.
[172][173] Las mejores prácticas de manejo para controlar hierbas puedes ayudar a retrasar la resistencia.
[1][183] Los agricultores han aceptado a gran escala la tecnología de modificaciones genéticas (ver figura).
[2] Para el 2011, 11 cosechas transgénicas diferentes fueron crecidas comercialmente en 395 millones de acres (160 millones de hectáreas) en 29 países como EU, Brasil, Argentina, India, Canadá, Paraguay, Paquistán, Sudáfrica, Uruguay, Bolivia, Australia, Filipinas, Myanmar, Burkina Faso, México y España.
Sin esto, los agricultores tendrías que plantas las filas lo suficientemente alejadas para controlar el crecimiento de hierbas con labranza mecánica.
Sin embargo, algunos críticos han argumentado si los porcentajes son mayores y si el uso de químicos en realidad es menor con cosechas modificadas genéticamente.
La Grocery Manufacturers of America estimó en el 2003 que el 70–75% de toda la comida procesada en EU contenía un ingrediente modificado genéticamente.
Asimismo, los modelos usados muestran efectos positivos para los consumidores y un crecimiento económico más amplio.