Luis Manuel de Zañartu

Al cabo de cierto tiempo, fallecieron sus padres y, como único hijo (tenía una hermana en España) en territorio chileno, se convirtió en su heredero universal, transformándose en uno de los sujetos más ricos del reino.

Pasaron los años, y el joven Luis Manuel recibió noticia de su hermana Margarita, de que sus heredades en España habían sido gravadas con los acostumbrados impuestos cobrados a los pecheros (no nobles), lo cual ciertamente lo indignó.

La sociedad colonial chilena se debatía, bien entrado el siglo XVIII, en una profunda degradación moral, al punto de que las riñas callejeras, los desórdenes públicos, las masacres, la prostitución y otros vicios, no lograban sorprender a nadie.

Zañartu de formación estrictamente religiosa y puritana consideraba estas situaciones como indignas para el ideal de pueblo civilizado y le aterrorizaba que sus hijas se enfrentaran a esta sociedad degradada moralmente.

El historiador chileno Francisco Antonio Encina le atribuye una potente personalidad y liderazgo firme, unida a un carácter marcadamente inflexible y severo, elementos que considera propios de un alma vascongada: Agrega Encina que para Zañartu, los únicos medios eficaces para cristalizar su objetivo eran "los azotes, los grillos y los trabajos forzados".

Tras su designación, Zañartu se abocó con inusitada energía a los proyectos que tenía en mente en forma autocrática.

Hizo, además, recoger a todos los vagos, borrachines de taberna y facinerosos e inmediatamente fueron conducidos engrillados a las obras que se les señalasen, su figura comenzó a ser temida en la bohemia de la época; sin embargo, la concentración de poder, las envidias, una personalidad directa y honesta y sus acciones empezaron a formar en torno a él, hostilidades y maledicencias soterradas además de enemigos dentro de su misma clase social la cual le debía su salvaguarda y protección.

Zañartu y tras muchos esfuerzos administrativos y trabas legales, lograba iniciar las obras para construir un puente al estilo europeo sobre el Rio Mapocho que unía la ciudad con el camino de la Chimba (ex-Camino del Inca), la dirección técnica fue realizada por el Real ingeniero militar y constructor José Antonio Birt.

Birt Falleció durante la construcción del mismo en agosto de 1773, mientras se encontraba en Valparaíso.

En 1772, fallecía de Tifus, su esposa María del Carmen Errázuriz, cuyo apoyo emocional, compañerismo y consejos tiernos había otorgado serenidad y felicidad a su vida; este hecho lo devastó tremendamente, endureciendo aún más su fuerte carácter y terminando por aislarse del medio social en que vivía, sin quererlo, este hecho minaría lentamente su potente personalidad para trastocar en una temprana demencia senil.

Al día siguiente, su cadáver fue trasladado a la iglesia del convento que él fundara, el del Carmen de San Rafael, más conocido como "Carmen Bajo".

Un gentío variopinto asistió a la sepultura de los restos mortales del mítico personaje.

Una cruz de hierro sita en la cúspide del techo de la casa del ya fenecido corregidor, fue azotada por un fuerte viento y cayó con gran estrépito, sobresaltando a los vecinos.

El corregidor Zañartu por José Miguel Blanco (1888).
El corregidor Zañartu.
Puente de Cal Y Canto (1863)
Retrato del Corregidor de Santiago, Don Luis Manuel Zañartu y su esposa Doña María del Carmen Errázuriz, en el convento del Carmen Bajo en Santiago de Chile.