Situada en Ciudad Guayana se ocupa de los recursos forestales, hierro, bauxita, oro, diamantes y otros minerales para el desarrollo económico del país así como el desarrollo industrial y el sector hidroeléctrico.
En 1958 se crea oficialmente el Instituto Venezolano del Hierro y el Acero, y, junto a la Comisión de Estudios para la Electrificación del Caroní, se traspasa a la Corporación Venezolana de Fomento.
Poco después, sería creado el cargo de Comisionado Presidencial para la Región Guayana.
Se empezó apagando las celdas de reducción electrolíticas para reducir el consumo eléctrico generando graves consecuencias a las empresas del aluminio.
[8] La corporación está conformada por 14 empresas que explotan y se desarrollan en diferentes áreas, como lo son el sector minero, forestal, aluminio, servicios, entre otros.