La corita es un tipo de cesta con forma globular y extendida con brillantes colores hecha por artesanos seris, principalmente mujeres.
Se elaboran a partir de la fibra del Torote prieto (Jatropha cuneata), llamado Haat en lengua comca’ac, un arbusto típico del desierto, considerado sagrado para ellos.
[2] Es un proceso muy laborioso, las mujeres del grupo, buscan las ramas y las tuestan en el fuego para eliminar la corteza, con el apoyo de sus dientes van rasgando tiras de diferentes tamaños, dependiendo del diseño, tamaño y complejidad del tejido.
Después agrupan las tiras en pequeños bultos y las tiñen con productos vegetales, para el color negro utilizan la corteza del árbol del mezquite o lo extraen del chamizo; para el color marrón o café utilizan la raíz del cosohue o heepol, machacada y cocida; el color amarillo se obtiene de la flor de golondrina que llaman xométte.
[3] En el comercio realizan siete diferentes tipos de coritas y canastos.