Esto sugiere que los saltarines no tienen problemas para dispersarse a través de hábitats fragmentados fuera del bosque.
Forma grupos en sus áreas de reproducción, pero en las tierras bajas es más solitario, aunque puede unirse a las tangaras y otras especies que se alimentan en bandadas mixtas.
Al igual que otros saltarines, esta especie tiene un ritual de apareamiento fascinante en un lek comunal.
La especie C. altera fue descrita por primera vez por el ornitólogo austríaco Carl Eduard Hellmayr en 1906 bajo el nombre científico de subespecie Corapipo leucorrhoa altera, la localidad tipo es «Carrillo, Costa Rica.»[2] El nombre genérico femenino «Corapipo» se compone de la palabra del griego «korax, korakos» que significa ‘cuervo’ (por el color negro) o «korē» que significa ‘ninfa’, ‘títere’; y de la palabra del latín moderno «pipo» que es la designación genérica de los saltarines; y el nombre de la especie, «altera» en latín significa ‘segundo’, ‘próximo’, ‘otro’.
[7] Según las clasificaciones del Congreso Ornitológico Internacional (IOC)[8] y Clements Checklist/eBird,[9] se reconocen dos subespecies, con su correspondiente distribución geográfica:[3]