Corallium rubrum

El esqueleto interno presenta todas las tonalidades del rojo, el color blanco y el negro.

Las ramas las forman pólipos de color blanco traslúcido; el tejido que las recubre suele ser de color rojo, a veces blanco o amarillo.

A esta necesidad respondió el Real Decreto 1415/2005, de 25 de noviembre,[4]​ por el que se reguló la pesca del coral rojo y su primera venta, y que derogó los dos primeros Reales Decretos.

El coral rojo era una especie abundante, pero debido a la explotación abusiva con fines comerciales de la que ha sido objeto, hoy en día ha desaparecido de muchas zonas.

Las colonias grandes, de entre 20 y 30 cm, sólo se encuentran a gran profundidad, entre 40 y 400 m. En aguas superficiales los ejemplares son de 6 u 8 cm.

Por otra parte, según el pensamiento mágico, en gran parte del mundo (por ejemplo los esqueletos humanos pintados con rojo cinabrio en la América precolombina y, especialmente en Europa) el color rojo es considerado fasto o portador de buena fortuna (por ejemplo en idioma ruso la palabra equiparable (kрасный) a rojo no denota solo a un color sino a la belleza y a la buena suerte, el color rojo por lo general está asociado a la vida, a la fuerza y a la fuerza vital, esto explica que en cierta joyería popular de origen italiano se use al coral rojo (e incluso desde mediados del siglo XX a imitaciones de plástico) para el cuerpo principal, fálico del amuleto llamado cornicello o cuerno napolitano.

Colonia de C. rubrum comenzando a expandir sus pólipos
Corallium rubrum en Grotta Nereo, Cerdeña, Italia
Detalle del rojo esqueleto.
Joyas de coral rojo para la reina Farida de Egipto , Ascione, 1938. Museo del Coral, Nápoles