Copa Jules Rimet

En esa edición, Brasil la ganó en propiedad al haber logrado el campeonato por tercera vez, como estipulaban las reglas.

Tras su robo y fundición en 1983, hoy solo se conserva la base original de lapizlázuli.

La figura tenía los brazos levantados, y sujetaba una copa de forma octogonal.

[1]​ El entonces presidente de la FIFA, Jules Rimet, ordenó que fuese hecho en oro.

Al año siguiente, estalló la Segunda Guerra Mundial, por lo que, tras suspenderse los torneos de 1942 y 1946, el trofeo estuvo en la península itálica durante casi diez años.

[7]​ No se equivocó, pues en 1941, tras buscarlo en el banco, agentes de la policía secreta alemana llegaron a allanarlo.

El 20 de marzo de 1966 entre las 11:00 a. m. y las 12:10 p. m., mientras en el primer piso del lugar se celebraba unas ceremonia religiosa, un ladrón entró por la puerta trasera del edificio y salió sin dejar rastro.

Éste, quien iría acompañado con una caja con sólo £500, logró arrestar al secuestrador, un exmilitar de apellido Bechley.

Sin embargo, luego del arresto de éste, finalmente desiste y lo abandona, siendo encontrado días después.

En este lugar permaneció sin problemas por más de una década, hasta el año 1983.

Si bien ésta estaba hecha de plexiglás antibalas, la parte posterior había sido fabricada con madera y pegada con cinta a la pared.

Recién en 1988, la Justicia condenó a nueve años de prisión a Vieira da Silva y Rocha Rivera, mientras que al joyero argentino le dieron tres años de sentencia por receptación.

[21]​ Existen, a su vez, al menos tres réplicas vinculadas directamente con la historia del trofeo.

[22]​ Actualmente, la réplica que conserva la FIFA en su museo en Suiza, lleva esta primera base.

Esto duraría hasta 1970, cuando, tras devolver el original a la FIFA, ésta desautorizó su uso, siendo ocultada por su creador.

Tras el robo, en 1984 la empresa Eastman Kodak recibe la autorización de la FIFA para mandar a hacer una réplica exacta del trofeo siniestrado.

Ottorino Barassi, en aquel entonces vicepresidente de la FICG, retiró en secreto el trofeo de un banco en Roma y lo escondió en una caja de zapatos debajo de su cama para evitar que los nazis se apoderaran de él.
Placa en homenaje a Pickles, el perro. Instalada el 2018 a la entrada de St. Valery flats, se ubica cerca de donde éste encontró el Trofeo en Beulah Hill, Upper Norwood.
Estampilla brasileña del Mundial de 1970, año en que su selección se haría de forma definitiva con el trofeo.
La base original del trofeo hoy está guardada, junto a la réplica oficial de la FIFA, en su museo en Zúrich , Suiza .