Estudia bachiller en Oviedo y Gijón hasta el año 1906 en que emigra a Cuba.
Tras realizar diferentes trabajos funda una librería y comienza a enviar crónicas y cuentos a periódicos asturianos.
En 1921 regresa a España instalándose en Madrid pero mantiene su relación con Cuba enviando columnas a los periódicos cubanos.
Colabora en los periódicos madrileños Heraldo de Madrid, La Esfera, Nuevo Mundo, Por esos Mundos y España y América.
En 1923, en reconocimiento a su trabajo, se le otorga la Medalla al mérito naval.