Consolidación democrática

Este es el caso cuando: ningún grupo político significativo intenta seriamente derrocar al régimen democrático, el sistema democrático es considerado como la forma más apropiada de gobernar por la gran mayoría de la población y todos los actores políticos están acostumbrados al hecho de que los conflictos están ocurriendo.

Las democracias no consolidadas a menudo sufren de clientelismo y elecciones formalizadas pero intermitentes.

Él piensa que los académicos se centran demasiado en las instituciones formales como impulsores de la consolidación, mientras que las instituciones informales y las reglas de un estado a menudo se pasan por alto.

Su enfoque consiste en comparar las reglas institucionales formales (por ejemplo, la constitución) con las prácticas informales de los actores, argumentando que en muchos países existe una "brecha" entre las dos.

[3]​ Algunos académicos identifican la tolerancia política y la confianza en las instituciones como importantes para la consolidación democrática.

Esto deja a muchas democracias nuevas en el mundo en desarrollo con problemas en términos de gobernanza efectiva debido a la falta de profesionales altamente calificados.