Consolamentum

El Consolamentum era el único sacramento administrado por los cátaros,[1]​[2]​ una especie de bautismo, comunión y extremaunción juntas.

No participaban en los sacramentos católicos, ya que detestaban a la Iglesia de Roma.

Este ritual fue tomando diversas formas y proviene, en su origen, de algunos grupos sectarios cristianos que desconocían toda jerarquía eclesiástica.

Esto permitía a muchos creyentes ser perdonados de sus pecados y placeres mundanales durante su vida terrenal y recibir la absolución poco antes de morir, ya que era imprescindible recibir este sacramento para poder ser salvado.

Sin embargo, una escuela gnóstica conocida como Lectorium Rosicrucianum, señala que la endura no es un suicidio y nada tiene que ver con la muerte física, por el contrario es una muerte mística, es la entrega del yo en auto-ofrenda, es la muerte del yo [cita requerida], una entrega del alma mortal y perecedera para el renacimiento de un alma inmortal e imperecedera y la entrada en una nueva vida, perfecta, santificada, para el servicio a la humanidad.