El conducto endolinfático es una estructura anatómica de forma tubular que se encuentra situada en el oído interno.
Parte del conducto utriculosacular que une el utrículo con el sáculo y atraviesa el acueducto vestibular para desembocar en un fondo de saco que se llama saco endolinfático en el hueso temporal del cráneo, donde entra en contacto con la duramadre.
A través del conducto endolinfático circula la endolinfa.
[1][2] En la región del saco endolinfático pueden desarrollarse tumores malignos, entre ellos el tumor de Heffner o adenocarcinoma papilar.
Este tipo de cáncer aparece con más frecuencia en los pacientes afectados por la enfermedad de Von Hippel-Lindau.