Conde de Cotoca

Santiago María del Granado y Navarro Calderón, primer conde de Cotoca, también conocido como Santiago Granado (Cádiz, España, 1757 – Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, 1823), fue un médico y noble español que, ya entrado el siglo XIX, recorrió algunos de los más remotos dominios de la América Meridional, los que comprendían vastas zonas indígenas, inoculando la vacuna contra la viruela, recientemente descubierta.[1]​ Este médico gaditano dedicado a la labor humanitaria es el tatarabuelo del poeta laureado boliviano don Javier del Granado y Granado.[4]​ La acción humanitaria que desplegó, paralela a la expedición de Francisco Javier Balmis y Josep Salvany i Lleopart contra la viruela en las colonias de ultramar, no podía haber sido más encomiable y es un episodio trascendental de la medicina española.Representa un intento de saldar la deuda histórica que los conquistadores del siglo XVI habían contraído con la población americana.A raíz del descubrimiento, conquista y colonización del Nuevo Mundo, una variedad de enfermedades desconocidas para los indígenas comenzaron a causar miles de víctimas entre los mismos, siendo la viruela la más fulminante y catastrófica de ellas.