La composición de las artes visuales son actividades propias del ser humano, mediante las cuales se satisfacen ciertas necesidades estéticas y prácticas.
Constituyen una unidad orgánica que permite ordenar los elementos conceptuales, visuales y técnicos, necesarios para el acto creador.
Se basa en la hipótesis de que los seres humanos tienden a encontrar imágenes visuales que reflejan sus propias preferencias y deseos en la vida más agradables y atractivas.
En la pintura, el artista puede realizar un trabajo de pincel menos detallado y definido hacia los bordes del cuadro.
Sin embargo, las formas con segmentos de línea son consideradas elementos lineales para el artista.
Las líneas pueden también dirigir la atención hacia el tema principal del cuadro, o contribuya a la organización dividiéndola en los compartimientos.
A menudo el cerebro, inconscientemente, lee cerca de líneas continuas entre los diversos elementos y temas en las distancias que varían.
El ángulo y la relación al tamaño del bastidor ambos trabajan para determinar la influencia que la línea tiene en la imagen.
También son influenciados fuertemente por tono, color, y la repetición en lo referente al resto de la fotografía.
Las líneas convergentes firmemente pescadas con caña dan un efecto dinámico, animado, y activo a la imagen.
También generalmente más estético están satisfaciendo, pues los asociamos a cosas suaves.
Comparado a las líneas rectas, las curvas proporcionan una mayor influencia dinámica en un cuadro.