El instrumento puede ser completo o estar formado por varias piezas individuales (alargadores) conectadas entre sí.
Los compases radiales se pueden extender agregando varillas acopladas a presión o mediante tornillos.
[4] Los cursores están ideados para sujetar tanto la aguja sobre la que gira el compás como el útil de marcado, permitiendo fijarlos sobre la barra a la distancia deseada.
En algunos modelos, un mecanismo de resorte y tornillo permite bloquear el compás en la ubicación precisa deseada.
La herramienta consta de un vástago cuadrado con un pivote deslizante que se bloquea en la ubicación deseada con una palomilla.
El vástago suele estar graduado en 16 unidades (y cada unidad está subdividida en 4 partes).