La comedia palatina es un subgénero teatral del Siglo de Oro español.
Sus límites aparecen como poco precisos, pues puede predominar el tono cómico o el serio.
En el primer caso, sería el equivalente cortesano de la comedia de enredo, con la misma temática de amor y celos y el desenlace en bodas, aunque aquí los personajes pertenecen a la alta nobleza o la realeza y sus nombres son altisonantes (Rosaura, Violante, Arnesto...) A ello contribuye la lejanía espacial de la localización (países como Italia, Hungría o Polonia) y la ubicación cronológica en un tiempo pasado con algunos detalles históricos que no aparecen en la comedia de capa y espada.
Suele también estar presente, como rasgo caracterizador, el amor entre personas de desigual condición social.
En estas comedias se tiende a respetar las unidades de lugar y tiempo en sentido amplio (barroco y no clasicista) y la unidad de lugar suele ceñirse a los contornos de ducado o condado, aunque dominan los escenarios interiores o anejos, como el jardín.