Hacia febrero de 1818, las tropas al mando del general Mariano Osorio arribarían al puerto de Talcahuano, comenzando una intensa ofensiva.
Ya en ese periodo, tanto Bernardo O'Higgins como José de San Martín se mantenían informados al respecto, y planeaban enfrentar al general Osorio.
Su intención era evitar que cruzara el río Lircay, pues desde allí las tropas realistas ya se encontraban en posición defensiva, insuperables para el batallón de González Balcarce.
La carga patriota careció de eficacia, pues al intentar acercarse se encontrarían con una impenetrable defensa, esto sumado a las condiciones geográficas del terreno, provocaría algunas pérdidas, incluyendo al oficial escocés Gerrad.
Osorio, por su parte, lograría llegar sin novedad a Talca, para posteriormente reunirse con sus oficiales y decidir su siguiente movimiento.