Comarca de Alcalá

La región está formada por dos comarcas naturales cuyo límite natural es el río Henares: Al norte se extiende la unidad de La Campiña, una llanura con escasas elevaciones, destacando montes como La Muela (818 m), Santa María (762 m) o Bujés (762 m) y atravesada de norte a sur por arroyos que tributan sus aguas al Henares como el río Torote, Camarmilla, Las Monjas, Valmediano, Ardoz o Pelayo.Sucede al contrario en los servicios de Cercanías, el cual posee estaciones en todos los municipios por los que transcurre la vía (Coslada, San Fernando, Torrejón, Alcalá y Meco).La apicultura se extiende a lo largo del linde con Guadalajara, actividad propia de toda el área natural alcarreña.[9]​ En la Campiña se extienden extensos paisajes cerealistas, únicamente interrumpidos por los propios núcleos urbanos.[10]​ En esta primera fase se produce una evolución que lleva desde los primeros asentamientos situados de forma dispersa y de población más bien equitativa, hacia una creciente concentración poblacional en determinados poblados.Desde los primeros pobladores, bien en algunos momentos del Bronce, bien en tiempos del Hierro, la población se asentaba en tribus de manera dispersa y equitativa por todo el territorio, aunque siempre con mayor preferencia hacia los ríos de mayor entidad: río Henares, río Tajuña y Jarama.La configuración de la población se mantendrá igual que en la época visigótica, hasta la repoblación fomentada por el Fuero Viejo, en 1135.Estos además crecerán mientras que el crecimiento en la capital será más moderado (por tanto, se acortan diferencias demográficas).El poblado además contaría con tiendas esenciales para los habitantes del recién fundado San Fernando.La cercanía de Madrid además repercutirá en otro aspecto: municipios que habían sido vinculados a Alcalá en el ámbito administrativo judicial perderán su identidad como municipios convirtiéndose es barrios de la capital tras una decisión ministerial forzosa.Barajas (que ya había absorbido el siglo anterior a la Alameda de Osuna), Canillas y Canillejas lo harán en 1949.En 1975, 42266, lo que supuso duplicar la población en cinco años, y más espectacular fue el posterior crecimiento hasta 75398 habitantes en 1980.Todo esto, indicará que a partir de ahora la población no se centralizará en una única población, sino que ahora hay varios núcleos urbanos de relevancia.En el último tercio del siglo XX aparecerá el fenómeno de las grandes urbanizaciones y en la comarca alcalaína será un hecho que proliferará en gran medida.Algunas de ellas son: La Cardosa en Valdeavero; Los Berrocales en Paracuellos; El Robledal, El Gurugú, Zulema y Peñas Albas en Villalbilla; Eurovillas en Nuevo Baztán (según algunas fuentes la mayor de Europa[11]​); Santo Domingo en Algete; Urbanización Miraval en Valdeolmos-Alalpardo.Ya en la Edad de Hierro, con la llegada de las culturas más civilizadas, hizo su aparición la cultura carpetana, la cual estaba extendida por prácticamente toda la comarca habiéndose encontrado yacimientos en Fuente el Saz, Daganzo, San Fernando, Rivas, Villalbilla, Paracuellos y sobre todo junto al Cerro del Viso, donde se sitúa un castro celtíbero en el que fue encontrado un pequeño tesoro con monedas en las cuales en algunas de ellas estaba acuñado el nombre celtíbero de Alcalá: Ikesancom Kombouto.También existía el asentamiento que los romanos llamaron posteriormente Alternia (Arganda), el Meco celtíbero (Miccon) y la aldea ligur de Usco (Orusco).Los romanos colonizaron estas tierras mediante campañas militares dirigidas por Marco Porcio Catón hacia el año 195 a. C. y con ello fundaron Complutum.Su rápida expansión y prosperidad se dio gracias a su estratégica situación territorial.[13]​ Al igual que Iplacea, otro poblado celtíbero fue transformado al modo romano: Se funda Miaccum (Meco) sustituyendo a la antigua Miccon; mientras tanto, otros asentamientos se crearon de planta nueva: Thermeda (Tielmes), Torres de la Alameda, Valdetorres de Jarama y tiempo después Coslada (alrededor del siglo VI).Durante el periodo de ocupación árabe surgirán una gran parte de los actuales núcleos urbanos: Ajalvir (entre los s. VIII-X), Arganda, Algete (núcleo actual), Ambite, Cobeña (s. IX), Paracuellos, Pizola (Pezuela), Valdeavero, Valdilecha y Velilla.Pero en 1135 se declaró el Fuero Viejo, acta que otorgaba a Alcalá la denominación de villa clerical, con lo que la tierra de Alcalá pasaba a tener privilegios económicos y políticos.El 1 de julio de 1109 falleció Alfonso VI tras haber puesto gran empeño en recuperar Alcalá, porque era fundamental para la defensa del reino de Toledo, constantemente amenazado por los almorávides, quienes, al caer Alcalá, no tardaron en llegar, al frente de su emir Ali ben Yusuf, a Toledo y cercar la plaza, llegando al mismo tiempo hasta Madrid y Guadalajara, y saqueando y arrasando sus términos.Esta donación que el rey efectuó al arzobispado de Toledo, junto a otras donaciones y privilegios que sucesivos reyes irían efectuando del mismo modo, se debió a la generosa ayuda que los prelados prestaban a los monarcas en sus luchas reconquistadoras de los territorios ocupados por la invasión árabe.En el Fuero se detallaban las 25 villas prelaticias del alfoz complutense, Alcalá y sus aldeas, que pronto sufrieron una merma al entrometerse el Concejo de Segovia, que, por ayudas prestadas al rey, adquieren la tierra entre el Henares y el Tajuña, a saber: Ambite, Arganda, Campo de Almirag, Carabaña, El Quexo, El Villar, Loeches, Olmeda, Orusco, Perales, Pezuela, Querencia, Tielmes, Valdemora, Valdetorres, Valdilecha, Valmores, Valtierra y Vilches.Un caso singular en el conjunto de la Tierra lo constituiría Santorcaz, por su estatus y tratamiento notablemente diferenciado.[18]​ Esta situación duró hasta el siglo XVI, época en que la mayoría de estas aldeas, que estaban en situación de inferioridad jurídica en relación con la capital del alfoz, y que habían prosperado en riqueza y población, buscan su independencia a través de la negociación para obtener su correspondiente carta de villazgo, según dan a conocer las declaraciones que han quedado recogidas en las Relaciones Geográficas mandadas efectuar por Felipe II.Bajo la regencia de María Cristina de Borbón se crea un nuevo modelo territorial para España, basado en el francés y que aún perdura hasta nuestros días, en el que la nación queda dividida en provincias.Como también indicamos anteriormente, a pesar de ello, Alcalá mantuvo diputados y senadores hasta la Segunda República Española.[cita requerida] Después de la Guerra Civil varios municipios que habían formado parte del partido judicial de Alcalá desde el siglo XIX, como Canillejas o Vallecas fueron incorporados a la capital mediante reales decretos.
Paisaje del Parque de los Cerros.
Vista del Ecce Homo. A la izquierda sobre el cerro de la Tortuga, se divisa la campiñera Meco.
Línea de FFCC Madrid-Zaragoza-Barcelona a su paso por la Estación de Torrejón de Ardoz
Mapa de la Comarca de Alcalá con sus dos subcomarcas (Alcarria y Campiña) más el resto de municipios pertenecientes a la Diócesis. La Campiña Alcarria Diócesis
Camarma
Cobeña
Anchuelo
Arganda del Rey
Ribatejada
Villar del Olmo
Palacio de Goyeneche e Iglesia de San Francisco Javier en Nuevo Baztán
Ermita de San Blas, antigua iglesia del pueblo de Canillas, perteneciente al Partido judicial de Alcalá de Henares
Ayuntamiento de Perales de Tajuña
Viñedos en Tielmes (antigua Thermeda)
Vista aérea de Torres de la Alameda
El "Qal'at'Abd al-Salam", el castillo musulmán que posteriormente daría nombre a la Villa y a toda la Comarca.
Monasterio de la Inmaculada Concepción en Loeches
Encina milenaria de Ambite [ 16 ] ​ y Palacio de Legarda
Vista general de Orusco de Tajuña
Carabaña en Semana Santa
Ayuntamiento de Pezuela de las Torres
Agencia de la Energía en Rivas
Bandera no oficial propuesta por Plataforma Provincia para Alcalá y otros para la comarca/provincia de Alcalá. [ 20 ]