Colt Walker
[1][2][3] Fabricado por primera vez en 1847, el Colt Walker no fue el arma corta de repetición a base de pólvora negra más grande y potente jamás fabricada, como se afirma por los autores norteamericanos frecuentemente, ya que algunos revolveres europeos, belgas, británicos y austriacos, muchos de ellos basados en diseño Adams Beaumont, y de grandes calibres, del 0.50" al 18 mm, le superaban.Por lo tanto, es falso, como se afirma por autores USA, que tal revolver ostentara el récord del revólver de mayor potencia en el mercado civil, hasta la aparición del cartucho .357 Magnum.Walker quería un arma de fuego corta con gran potencia a corta distancia, motivo por el que se asoció con Colt para crear el Colt Walker; este fue bautizado así en su honor.Este revólver, del calibre .44-.45, tendría que llevarse en una funda enganchada a la silla de montar, y además ser lo suficientemente potente para abatir tanto soldados como caballos enemigos.Como resultado de estas recomendaciones, Colt creó el revólver Walker, que fue utilizado en la Intervención estadounidense en México y en la frontera texana.Debido a la lentitud y laboriosidad del proceso, se prefería llevar varios tambores ya cargados, lo que permitía limitar la recarga a reemplazar el tambor vacío por uno cargado.Para evitarla, se untaba manteca encima de cada bala, una vez que estas habían sido introducidas en las recámaras junto con la carga de pólvora negra; así, las chispas producidas al disparar no prendían la pólvora en las otras recámaras.[9] En torno a 300 de los 1000 revólveres Walker asignados al Ejército de los Estados Unidos fueron devueltos al fabricante para que este reparase los tambores agrietados.