Colosas (Κολοσσαί en griego antiguo, Colossae en latín) era una antigua ciudad de Frigia, en la península de Anatolia, cuyo nombre puede ser una deformación del término colosal.
[1] En el año 396 a. C., en el transcurso de las guerras médicas, el sátrapa persa Tisafernes fue atraído a Colosas mediante un señuelo y asesinado por un agente de su rival Ciro el Joven.
Es conocida principalmente por la epístola del apóstol san Pablo, conocida como Carta o Epístola a los colosenses, carta enviada a la comunidad cristiana de Colosas en el año 57 o 62.
Al parecer, san Pablo no había visitado la ciudad antes de escribir su epístola a los colosenses, ya que expresa a Filemón en su epístola el deseo de visitar la ciudad nada más sea liberado de prisión.
[2][3] La población entró en decadencia, posiblemente debido a un terremoto, y cerca de sus ruinas se levantó la ciudad bizantina de Conas o Chonai,[4] la actual Honaz (Turquía).