El mal momento de retirada puede ocasionar semen en la vulva, el cual puede fácilmente migrar al tracto reproductivo femenino.
[7] Se ha sugerido que el líquido preeyaculatorio o preseminal ("fluidos de Cowper") emitido por el pene previo a la eyaculación, puede contener espermatozoides, los cuales fácilmente pasarían al tracto genital.
Se recomienda también evitar los días fértiles de la mujer al realizar este método anticonceptivo, para mayor eficacia y seguridad.
Comparadas con los métodos comunes reversibles (DIU, contraceptivos hormonales y preservativos masculinos), el coitus interruptus es el menos efectivo en prevenir el embarazo.
[10] El método puede ser difícil de usar para algunas parejas ya que la interrupción del acto sexual puede dejarlas frustradas o insatisfechas.
[14] A nivel mundial, cerca del 10 % de las mujeres en edad fértil confía en la retirada como su principal método anticonceptivo.