Dicha coloración suele seguir pautas: las hay moteadas y listadas.
Durante el invierno, la tasa de crecimiento es menor y la planta está quiescente, llegando a perder sus hojas basales.
Como otras euforbiáceas, su tallo emite un látex al ser herido que resulta irritante al contacto con piel y mucosas; es especialmente importante evitar el contacto con los ojos.
El género incluye unas 17 especies, de las cuales las más importante es C. variegatum.
Otras especies son: C. affine, C. hirsutum, C. megalanthum, C. pictum y C.