Cisma del fútbol uruguayo

El artículo 7 del estatuto no permitía que las instituciones afiliadas a esa entidad disputaran encuentros contra clubes de la Asociación Amateur Argentina.Peñarol amenazó que si la AUF mantenía su posición, no cedería a sus jugadores para el torneo.Finalmente la AUF mantuvo su postura, y fue a disputar la Copa América sin jugadores de Peñarol.Haciendo caso omiso a la negativa de la AUF, Peñarol y Central insistieron amenazando con abandonar el Campeonato Uruguayo si no se les permitía disputar los partidos.Se resolvió "no jugar directamente con la Asociación Argentina ni prestar los jugadores a la AUF para disputar con ella; concretar amistosos con la Asociación Amateur, por ser la expresión legítima y prestigiosa del fútbol argentino, presidida por el Dr. Becar Varela; cumplir los compromisos con la AUF dentro de una gran armonía fundamental de intereses, que el Club Atlético Peñarol aspira a conservar patrióticamente".Charley, Lito y Wanderers presentaron equipos alternativos para disputar simultáneamente los campeonatos de la FUF.Las personas designadas para asesorar al presidente fueron Juan Blengio Rocca, Héctor R. Gómez, Francisco Ghigliani, Carlos Sturzzenegger, Félix Polleri, Héctor A. Gerona, Juan Gorlero, M. Martínez Pueta, Alfredo Le Bas y Álvaro Saralegui.La segunda división, denominada intermedia, se integraría: El número definitivo de clubes para la segunda división se establecía también en doce, debiendo el Consejo Provisorio determinar el régimen de descensos y ascensos para llegar a ese número en el menor tiempo posible.La Asociación disputó cinco amistosos ante Paraguay en ese año, aunque sin los campeones olímpicos de 1924, ya que casi todos se habían ido con Nacional a una gira por Europa.Eran dieciséis equipos: Bella Vista, Capurro, Cerro, Colón, Chaná, Defensor, Fénix, Misiones, Olimpia, Peñarol del Plata, Racing, Roland Moor, Rosarino Central, Solferino, Sud América y Club Uruguay.