Charles Athanase Walckenaer, en su Ancienne Géographie, historique et comparée des Gaules, identifica Cicogni con el fundus Siconianus mencionado en la Tabula Alimentaria Traianea, encontrada en 1747 en Veleia.
En 1748 (por el Tratado de Aquisgrán) fue en el confine con el Reino de Cerdeña: por qué, tenía una aduana, una prisión y una pequeña guarnición para controlàr las fronteras y contrastar la práctica ilegal del contrabando.
Con el fin de resolver esta pregunta, los dos Estados vecinos en 1766 firmaron un acuerdo formal en el que Cicogni es nombrado como Aduana Ducal.
En 1943-1945, durante la Segunda Guerra Mundial, algunos partidarios fueron asesinados por los nazis, alrededor y en la misma aldea.
La aldea tiene su propia Pro loco, cuyo objetivo es el embellecimiento y la promoción del lugar junto con el Municipio de Pecorara.