A pesar de su desapego por las actividades escolares, consiguió superar sus estudios primarios, aunque con muchos problemas, pues no era bueno con las matemáticas.
Pero su verdadero debut en los escenarios no llegó hasta unos años más tarde, en plena Segunda Guerra Mundial: en 1944, tras frecuentar largo tiempo el "Bar degli Artisti", lugar de encuentro de futuras celebridades, conoció a Enzo Andronico y a un cómico llamado Ciampolo con los que formó el Trío Sgambetta.
En 1964 sus películas ingresaron una cifra que supuso el 10% del total de los beneficios conseguidos por la industria cinematográfica italiana.
Las diferencias con Franco finalizaron en 1980, cuando se disculpó públicamente en Domenica In, y la reconciliación oficial ocurrió en un programa televisivo en directo gracias a la intervención de Pippo Baudo.
Ciccio hizo todavía algunas actuaciones cinematográficas esporádicas, retirándose definitivamente en 1996 porque, como confesaba su hijo Giampiero, tras la muerte de Franco, Ciccio había perdido el estímulo, al igual que un marido con el corazón roto por la muerte de su esposa.