Debuta junto a Sammy Stewart en 1929, antes de trasladarse a Nueva York a comienzos de los años 1930.
En pleno éxito, muere en un accidente de circulación.
Su estilo se forjó en la escuela de coleman Hawkins, aunque con un sonido menos opulento y un vibrato más cortante.
Su fraseo y su improvisación sin florituras ni circunloquios, con un discurso nervioso y pleno de swing, en el que evitaba marcar los tiempos fuertes, le valieron la admiración de todos los músicos de su generación.
[1] A pesar de su corta carrera, grabó un gran número de registros.