Actualmente en su mayor parte corresponde a la provincia argentina de Formosa y a "La Banda Grande" o Chaco salteño, mientras que al noroeste se extiende al Chaco tarijeño o "Monte Bravo"; al sur se delimita por el antiguo cauce del río Bermejo, cauce que fuera también llamado Ypitá (es decir: "agua roja" en avañe'ẽ —o guaraní—, aunque en la zona los guaraníes nunca fueron una etnia prevalecente); al norte los límites visibles del Chaco Central se difuminan en áreas tectónicas de hundimiento por las que discurre el Pilcomayo que dan lugar a humedales como los Esteros de Patiño y los Bañados de la Estrella.
Tales humedales, por consecuencias antrópicas (derivación de caudales etc.), durante la segunda mitad del s. XX y el primer lustro del s. XXI se han visto muchas veces desecados.
Los tres principales ríos que en parte delimitan al Chaco Central: río Paraguay, río Pilcomayo y río Bermejo-Teuco constituyen por sus caudales y sus extensiones importantes hidrovías, pero la variación natural (debido a la llaneza del territorio) de los cauces de los ríos Pilcomayo y Bermejo, así como una incuria que ha favorecido a otros medios (más onerosos y antiecológicos) de transporte, ha hecho que hasta el presente tales potenciales hidrovías estén infrautilizadas.
Las principales etnias originarias que habitan el Chaco Central son, de oeste a este, las siguientes: wichí-weenhayek (mal llamados "matacos"), chorotí, pilagá, chiriguanos (en el extremo noroeste, el nombre por el cual es más conocida esta etnia de mixogénesis forzada entre guaraníes y mujeres arawakas del grupo hoy llamado chané es un adjetivo peyorativo de origen quechua pero, como la insultante palabra "guaycurú" que es de origen guaraní con los siglos han pasado a ser consuetudinarias de modo que hasta el reciente proceso de "reetnización" ocurrido a fines de siglo XX y a inicios del presente siglo los mismos pueblos que eran llamados con los "gentilicios" que originalmente eran insultos hacia ellos impuestos por sus vecinos llegaron a aceptar como propias tales denominaciones cuando tenían que expresar su identidad fuera del endogrupo.
Actualmente los "chiriguanos", al saber el significado insultante de tal palabra, están usando el nombre de avá-guaraní (aunque tal nombre tampoco es correcto ya que solo alude a sus linajes avá y omite los casi siempre forzados linajes maternos de origen arawak-"chané"), chané (también en el extremo noroeste), maká en el extremo noroeste, y qom (mal llamados "tobas") en el centro.