Se trata de una pequeña elevación del terreno, ubicada en la parte final del camino que conducía en su momento al monasterio de Atocha, que empieza a cobrar importancia en los últimos años del siglo XVI, desde el momento en que se construye una ermita dedicada a San Blas,[1] cuyo nombre va a utilizarse desde entonces para designar también aquel "cerrillo".A comienzos del siglo XVIII los frailes de Nuestra Señora de Atocha solicitaron al Ayuntamiento la desaparición del cerro.El promontorio aparece reflejado en el plano de Teixeira, identificado con su ermita, que fue demolida a finales del siglo XIX.El arquitecto Juan de Villanueva diseñó el Observatorio, que ocupa la posición más alta de la montaña.El edificio del Instituto Cajal, inaugurado en 1932, tuvo su sede en el cerro de San Blas, cambiando su nombre para honrar la memoria de su fundador.
Plano y relación de edificios y organismos emplazados en el Cerro de San Blas