El Centro de Militares para la Democracia Argentina (CEMIDA) es una organización formada por militares demócratas en 1984 con el fin de promover el espíritu de democracia y legalidad en las Fuerzas Armadas argentinas.
El CEMIDA destaca por mostrarse muy favorable que se esclarezca quiénes fueron culpables de delitos aberrantes, y que esos reciban las sanciones que las leyes determinan y así el resto de los militares queden libres de toda sospecha y hayan recuperado la admiración y respeto de la ciudadanía a las fuerzas desde un espíritu basado en el código de conducta que les diera José de San Martín.
[2] Osvaldo Bayer sostiene que: Los objetivos declarados de la institución son apoyar la institucionalización en la República, al pensar que la democracia constituye el único medio para lograr la profundización de la liberación argentina y latinoamericana.
También hacer conocer a la opinión pública y en particular a los Oficiales de las Fuerzas Armadas, la existencia de un pensamiento militar genuinamente constitucionalista opuesto a toda manifestación militar que exceda los límites de lo legal, lo moral y lo ético; según las más puras tradiciones sanmartinianas.
Finalmente, el CEMIDA «busca propiciar la recuperación para la Nación Argentina, de las fuerzas armadas con sentido nacional y continental, al relacionar su función con su creación durante las luchas por la independencia y su virtud fundamental debe ser la subordinación de su acción a la voluntad soberana de los ciudadanos.»[2] En abril del año 2012 el CEMIDA decidió autodisolverse, ceder la guarda de todo su material a la secretaria Elsa Bruzzone, e iniciar una nueva organización que se llama "Centro de Militantes por la Democracia Argentina", conservando así la sigla CEMIDA pero pudiendo admitir ahora todo tipo de miembros, no exclusivamente militares.