Además hay algunos núcleos de población ceceantes aislados del entorno mayoritario seseante en Jaén y Córdoba.
Los "dialectólogos muy atentos han encontrado en rincones americanos como pujos de s ceceada".
[3][4] En Honduras se ha documentado en los departamentos de Colón, Francisco Morazán y El Paraíso.
No obstante, actualmente la pronunciación ceceante está mejor valorada entre los hablantes que la practican y la consideración social del fenómeno ha perdido normalmente, dentro del entorno mayoritario de su uso y en menor medida en el resto de Andalucía, el estigma que acarreaba frente al seseo o la distinción.
En la actualidad, mayoritariamente los ceceantes ya no ven necesidad de renunciar al ceceo y solo manifiestan un cambio hacia la distinción o el seseo ocasionalmente, en contextos conversacionales de tensión lingüística en los que algún interlocutor sea no ceceante.