La primera vez, en el año 408 a. C. tanto ecuos como volscos, reunidos en Antium, emprendieron la guerra con especial agresividad.
Los colegas de Ahala, Publio Cornelio Coso y Cayo Julio Julo, se disputaron su dirección, a pesar de que el Senado prefería entregar el mando a un dictador.
Dos de sus colegas, Manio Sergio Fidenas y Lucio Verginio Tricosto Esquilino, cayeron en una agria disputa a causa de la antipatía que sentían el uno al otro.
Ahala, entonces, amenazó con nombrar un dictador para desatascar la situación, lo que calmó los ánimos y se pudo llevar a cabo las elecciones.
Los nuevos tribunos consulares accedieron al cargo en las calendas de octubre, por lo que Ahala y sus colegas abdicaron el día anterior.