Las calendas (en latín: kalendæ) en el calendario romano antiguo eran el primer día de cada mes,[1] teóricamente cuando ocurría la luna nueva o novilunio en un ciclo lunar (calendarios de Rómulo y Numa Pompilio).
Además, los deudores tenían que pagar sus deudas este día.
[2] Las siguientes líneas de poesía ayudan a calcular el día del mes desde las calendas:
[3] Para calcular el día de las calendas del próximo mes, es necesario contar el número de días que quedan del mes actual y luego agregar dos a ese número.
Las Matronales eran las fiestas que las damas romanas celebraban en las calendas de marzo, mientras que las Fabariae Kalendae eran en las calendas de junio, donde se ofrecían las nuevas habas.