[2] La iglesia en sí está decorada con azulejos del siglo XVII, y originalmente tenía pinturas murales en el techo de la nave, pero éstas estaban casi completamente ocultas por varias capas de cal.
[7] El asentamiento se convirtió en un importante centro minero durante el período romano, siendo conocido como Vipasca.
[7] Según los registros arqueológicos, la colina habrá estado habitada desde entonces, mientras que los documentos históricos apuntan a la reanudación de las operaciones mineras aún durante el período del Califa.
[7] La ocupación en la zona del castillo duró hasta finales de la época medieval, durante el siglo XV.
[2] Los trabajos comenzaron con una prospección en 1989, durante la cual se limpió la zona circundante para tratar de encontrar las antiguas murallas del castillo, y se descubrieron rastros del calcolítico y del medieval, tanto islámicos como cristianos, con una interrupción durante la Edad de Hierro y la época romana.
[2] Los trabajos continuaron en 1995 y luego tuvieron un paréntesis hasta 1998, cuando se confirmó la estratigrafía investigada en años anteriores, con una capa de cerámica prehistórica seguida por otras del período medieval.
[2] Las excavaciones en el interior del castillo continuaron en 2010, y se encontró otra capa de nivel calcolítico.