Castellnovo

Debido a ello el término es muy abrupto aunque no presenta altitudes demasiado elevadas, destacando los picos de San Roque y Malara con 571 y 564 metros respectivamente.

Almedíjar, Navajas, Geldo, Segorbe, Soneja, Peñalba y Vall de Almonacid.

El castillo data del tiempo de los romanos, que más tarde fue restaurado por los moriscos, y por este motivo le pusieron el nombre de Castell Novo, tomando la villa este nombre.

Tradicionalmente la economía del municipio ha estado basada en la agricultura, el comercio y la pequeña empresa.

Debido a la cercanía con el río, es muy importante la agricultura de regadío, produciendo naranjas, caquis, nísperos y cerezas, dominando el secano las almendras, olivas y algarrobas.

[4]​ En 2016, se volvió a plantar un nuevo olmo en el emplazamiento del antiguo.

[5]​ En la actualidad, la Plaza del Olmo es un lugar frecuente de reuniones y fiestas.

Las fiestas patronales se celebran en la semana posterior al 15 de agosto.

Entre los diversos actos destaca el toro embolado, debido a que es sacado desde la cisterna debiendo estirar los mozos la cuerda durante un centenar de metros hasta que la introducen en el pilón, siendo éste procedimiento poco corriente en las zonas con tradición taurina.

Durante ese mismo mes, se celebra el Mercado Medieval en el entorno histórico del castillo de Doña Beatriz de Borja, que en año 2009 cumplirá su décima edición.

Durante los treinta primeros años de andadura musical la Sociedad estuvo dirigida por D. Julio Sabater, D.Emilio López Orduña y D. José Font Catalá.

Los músicos estaban tan contentos que al llegar al pueblo dieron un concierto por las calles del pueblo para dar cuenta de su triunfo a todos los vecinos que no pudieron oírlos tocar.

Panel mural cerámico de anuncio de la llegada al municipio de Castellnovo.
Ayuntamiento de Castellnovo.
Vista desde el Castillo.
Cisterna árabe