Caso de corrupción en la SAT en Guatemala

[1]​ Inicialmente confundido con el Caso de La Línea —el cual terminó con el gobierno del exo presidente Otto Pérez Molina y de Roxana Baldetti en 2015—, pero la CICIG aclaró que aunque las escuchas telefónicas del Caso de la Línea fueron utilizadas en esta investigación, se trata de otra red de corrupción.[1]​ El 12 de febrero de 2016, inicialmente se informó en la prensa guatemalteca que la CICIG y la Fiscalía de Delitos Económicos del MP habían realizado otro grupo de detenciones del caso La Línea, pero la CICIG rectificó al mediodía indicando que era un nuevo caso de corrupción en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), esta vez relacionado con las empresa Aceros de Guatemala y Tres Puertos, las que habrían utilizado una red de corrupción liderada por Omar Franco Chacón, ex Superintendente de Administración tributaria capturado por el caso de La Línea— y Geovani Marroquín Navas.La Policía Nacional Civil informó que se realizaron allanamientos en Mixco, San Miguel Petapa y varias zonas de la Ciudad de Guatemala; los acusados fueron detenidos por los delitos de asociación ilícita, cohecho activo, cohecho pasivo, tráfico de influencias, obstaculización de la acción penal y colusión.[2]​ Incluso, cuando la SAT apeló la resolución que favoreció a Aceros de Guatemala en 2014, Marroquín actuó nuevamente para que se desestimaran definitivamente los casos.[10]​ La familia Gabriel Abularach es propietaria de Aceros de Guatemala, la que José Luis Gabriel Abularach fundó con el nombre de «Distribuidora Universal»; la empresa se dedica a la importación y venta de materiales para la construcción.