El valle está rodeado de cumbres, bosques, praderas y ríos.
La historia nos dice que era una casa que alquilaba Burón a uno de sus vecinos, de ahí le viene su nombre: Casa a suertes, como se llamaba antes del año 1900.
La fauna y la vegetación son muy variadas como: la lagartija de turbera, el tejón, la collalba gris, las hayas, los pinos, los prados, los sauces...
El día empieza con la tradicional parva, en la que un grupo de jóvenes del pueblo van casa por casa golpeando cazuelas y el tradicional tambor, desperando a todos los habitantes de la casa y ofreciéndoles una copa de aguardiente o vino dulce y una pasta típica de la zona.
La noche termina con una típica verbena popular, acompañada a altas horas de la noche con chocolate y sopas de ajo. Todos los alrededores de Casasuertes invitan a la práctica del senderismo y montañismo; ascensiones a las cumbres del pico Pandián- 2.012m o a la sierra de Cebolleda con el pico Gildar - 2.178m, son tan sólo algunos ejemplos de las muchas posibilidades que ofrece este maravilloso pueblo a sus visitantes, sin olvidar las praderas y el bosque del entorno, cobijo de una importante fauna.