Casa de los Comuneros

[1]​ Ocáriz ganó el remate de la casa al ofrecer, ocho mil quinientos patacones en efectivo.

Sixto Durán Buendía, compró la casa de Los Comuneros en el siglo XIX y vivió allí, junto a su esposa Policarpa López Durán, quien era la hija del general José Hilario López.

Todavía conserva en su interior y exterior la estructura antigua de la época colonial.

Sus puertas verdes se conservan, pesadas y de una madera robusta.

También hizo las veintidós esculturas que se encuentran ubicadas por el sector de La Candelaria y que representan a residentes o personajes de gran importancia en la zona.