La familia Lusignan (armenio: Լուսինյան, Lusinyan), tuvo su origen en Poitou, en Francia occidental.
Según la leyenda, el primer castillo fue edificado por el hada Melusina.
Los Lusignan fueron algunos de los nobles franceses que hicieron grandes carreras en las Cruzadas.
El reinado de Guido se ha considerado siempre desastroso: fue derrotado por Saladino en la batalla de Hattin (1187) y tuvo que huir a Chipre al perder casi todo el reino.
Le sucedería Amalarico, que también fue rey de Jerusalén en 1197.