En la actualidad pertenece a la colección del Museo Nacional de Dinamarca en Copenhague.
Lo llevó a su casa y dejó que su hijo jugara con el caballo, creyendo que la figura era solo un pedazo de juguete antiguo.
El elemento equino se encuentra sobre una estructura que comprende cuatro ruedas.
Bajo el disco también hay ruedas, conectadas asimismo al resto del objeto.
Para su realización se recurrió a una técnica de repujado y cera perdida en hueco.