Tras una importante carrera en su país natal en los años 40, Agosti se trasladó a México en los años 50 y realizó numerosas actuaciones en los años 80, a menudo interpretando astutos villanos.
Su porte y voz varonil lo hizo participar de galán en varias películas con el mimo Cantinflas, como Sube y baja (1959), El analfabeto (1960) y Un Quijote sin mancha (1969).
Agosti recibió una nominación al Premio Ariel como mejor actor secundario por La escondida en (1955) actuando al lado de María Félix y Andrés Soler.
Agosti también trabajó en el doblaje, primero en México y posteriormente en Los Ángeles.
Su hijo, Carlos Agosti Jr., participó en el doblaje de Robotech II.