Inició su participación en el motociclismo chileno coronándose campeón de enduro nueve veces entre 1986 y 1994.
En Europa ya se hablaba del «chileno solitario» y la gran destreza que tenía arriba de una moto.
Ese año la preparación había sido exhaustiva y los auspiciadores comenzaban a creer en su carrera.
Sin embargo, en su proyecto Rally Tour se contemplaban otras carreras que le darían el pie necesario para obtener mejores resultados.
[8] A lo largo de su carrera, demostró ser una persona intachable y un deportista solidario en varias oportunidades.
En honor a sus heroicas acciones y espíritu de compañerismo, recibió dos premios de juego limpio mundiales, otorgados por el Comité Olímpico Internacional (COI) y la Federación Internacional de Motociclismo (FIM), en parte por ayudar al piloto mongol Shagdarsuren Erdenebileg, quien durante el rally París-Ulan Bator tuvo un grave accidente que resultó en una hemiplejia irreversible.
En esa ocasión, De Gavardo renunció al podio y arriesgó su vida para meterse en sentido contrario a los vehículos, ya que era la única manera de asistir al piloto y llamar una ambulancia.