[1] Carl Hertz sirvió como soldado en el ejército de la Alemania Nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Fue capturado por las tropas aliadas y llevado a Estados Unidos.
James Franck, un amigo de su padre, con quién compartiera el Premio Nobel en Física, arregló la liberación de Hertz y le encontró trabajo en Lund, Suecia para que pudiera abandonar Estados Unidos sin tener que retornar a Alemania.
Por pura curiosidad, hizo algunos ensayos no destructivos con ultrasonidos, un tipo de ensayos en los que es posible detectar cambios no visibles en los materiales (tales como huecos, grietas, etc) aplicándolos a cuerpos metálicos.
Hertz había inventado la impresora a chorro de tinta.