Al constatarse de esto, los xochimilcas fueron por tule e hicieron largas cadenas y con eso amarraron la iglesia para evitar su colapso.
La fachada tiene un nicho con una imposta al centro; termina la construcción en pendiente a los lados con forma de onda, rematando en cada esquina con dos pequeñas almenas.
También, esta cúpula cuenta con ocho ventanas coronadas con frisos, tiene linternilla y remata con una cruz.
En el centro el Santo Patrono San Juan Bautista en un nicho con imposta; de cada lado, tres columnas lisas.
Las bóvedas son de tipo cañón corrido, con dos arcos decorados con rosetones y grecas en estuco.
Estos arcos descansan en columnas de piedas que pertenecieron a los antiguos oratorios paganos.