Cada canción presenta la muerte en una forma poética aunque las descripciones son realísticas en el sentido de que reflejan experiencias comunes en la Rusia del siglo XIX: la mortalidad infantil o juvenil, el alcoholismo y la guerra.Este ciclo se suele catalogar como la obra maestra de Músorgski en el género.Siete años después, Shostakóvich continuó trabajando en el tema escribiendo su sinfonía n.º 14 para soprano, bajo y orquesta de cámara.Otras orquestaciones incluyen las hechas por Ramon Lazkano en 1994 (estrenada por Dmitri Hvorostovsky), y por Kalevi Aho en 2002.Cantos y danzas de la muerte han sido grabados por muchos intérpretes, incluyendo George London, Boris Christoff, Kim Borg, Martti Talvela, Matti Salminen, Anatoly Kotcherga, Paata Burchuladze y Aage Haugland.